Lecciones de quienes no tienen

Las personas en situación de sin hogar a las que acompañamos en la Red FACIAM, que  tanto llevan ya sufrido en sus vidas, consiguen en estos días de confinamiento, darnos una lección de vida. Mantener el ánimo, aplacar los miedos, sujetar las incertidumbres, hacer llevadera una convivencia de 24 horas al día, pero también participar y colaborar en el mantenimiento, limpieza, higiene, medidas e instrucciones sanitarias, contribuir a la buena marcha de la “casa”,.. son ahora su día a día. Nuestro aplauso es para todas ellas. Y lo hacemos porque no son visibilizadas en el fragor de esta batalla que nos ha tocado afrontar. Por eso aplaudimos a las personas que les gustaría hacer suya la orden o recomendación de “Quédate en casa” y que no les es posible. La respuesta a esta orden muchos, solo puede ser:  “Yo no tengo casa”. Porque todavía es necesario recordar que en un momento tan grave en el que quedarse en casa es la mejor respuesta, hay una parte de nuestra ciudadanía que no puede acatarla.

También el aplauso es para a los profesionales y técnicos han tenido que hacer frente a esta crisis, en los centros, proyectos y recursos para personas sin hogar; reinventándose, cuidándose pero cuidando, asumiendo las bajas e incorporando la ausencia de voluntariado que se ha  ausentado con bajas o por formar parte de grupos de riesgo. La dinámica diaria ha cambiado, las actividades grupales y talleres se han suspendido, pero se  mantienen servicios básicos. Se hace seguimiento telefónico y telemático de las personas en los proyectos en pisos. La reorganización de los espacios ha sido necesaria para el mantenimiento de las normas de higiene y salud en esta crisis de coronavirus. Se han previsto espacios para el aislamiento restándolos de otros dedicados a actividades, para ahora poder cuidar y proteger a las personas en caso de que apareciese algún caso o si alguna persona presentase síntomas.

Reivindicamos el valor del trabajo de la red de atención para personas sin hogar como servicios esenciales para una sociedad que desgraciadamente los convierte en imprescindibles.

Tras esta segunda quincena de confinamiento, seguimos con las manos en la tarea y la mirada en el medio y largo plazo para que, cuando todo esto termine, podamos haber aprendido algo.

Quizás podamos aprender que cuando una sociedad se organiza, se articula y establece prioridades, todo se puede alcanzar. Quizás podríamos hacerlo para conseguir que todos y todas tuviéramos al menos los derechos básicos cubiertos.

Quizás podamos aprender de esta crisis la importancia de los derechos de uno son los derechos de todos y que la salud de uno es la salud de todos.

Quizás podamos aprender la importancia de tener un lugar para poder “ quedarse en casa”.

 

 

Quédate en casa no es una opción para las personas sin hogar - Declaración de FEANTSA ante el COVID19
Documentos relevantes COVID19 - Personas sin Hogar

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